La jota
Acuarela. 29,7 x 42 cm. 2024
CONSUELO CAMPOS
Cuento una historia que de muy pequeña que me hacía llorar: la jota. Yo quería bailar para Pascua en las tres eras. Me llevó allí una pareja de novios amigos de mis padres y me empeñé en que quería bailar. Me decían:
—Que no van a querer bailar contigo.
Yo me escapé y me metí en medio, a bailar con todos. No sabéis la que se montó: tan pequeña y empezaron todos los chicos a bailar conmigo. A continuación le dije a mi madre que quería entrar en la rondalla. Tan pesada me puse que me apuntó y a ensayar todas las noches que decían al Socós. Mi pareja era José el Rana, éramos los más pequeños.Un día fue la rondalla a Sagunto y cuando salimos nosotros, el público nos tiraba caramelos. Los mayores, Manola, Mari Tere la Quinquillera y muchos más… me ponían a mí en el medio, con lo pequeña que era, y tocaban el solo de El sitio de Zaragoza. ¡Qué aventuras! Un día fuimos a bailar a la Puebla de Arenoso y por poco se cae el autobús por el barranco.